El ascenso de los sith

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Muchos, cientos de miles quiza, murieron en la guerra mandaloriana, en la que los mandalorianos casi derrotaron a la republica, y aun mas, al consejo jedi, el corazon de la republica.
Ahora, la galaxia esta sumida en el dolor, la perdida, y el desconocimiento. Y ahora, un mal se alza en el corazon de la republica, con los jedi dispersos y, siendo muy escasos, debido a la insurreccion de Revan y Malak al consejo, y de su decision de luchar en la guerra mandaloriana, las posibilidades de que la republica se recupere son casi nulas.
Las naves de la republica realizan todas las tareas posibles, sirven tanto de cruceros como de naves de transporte. Los fatigados soldados de la republica sirven como guardias y policias. Los mermados jedis, antiguos protectores y conservadores de la paz, se han visto obligados a enviar a sus jovenes padawan a ayudar a las fuerzas de seguridad de los cientos de planetas con problemas. Esta es, sin duda, la peor crisis que ha sufrido la republica. Y esta es su historia.

Que xungo lo tiene la galaxia xD
Weno, solo es el prologo pero es muy interesante

Vaya, vaya, vaya, Tras eres un makina con las historias y eso ke Firenic dice ke es el prologo, me ha gustao Tio tengo ganas de leerla y si eso puedo acer un Mod, BOOYAKA

Mas traicionado, no era yo el booyaka? xD

no ombre no digas eso , aber Booyaka es una expresion jaja, mia y weno no ace falta decirlo pero to los del foro Booyaka!!!!,

Es broma tio, no te lo tomes tan mal hombre

Tras, un soldado que sirvio junto a Revan y Malak en la guerra, fue uno de los pocos que aun quedaban fieles a la republica, pero embede seguir en el mermado ejercito de la republica, decidio ir el solo hacia planetas que hubieran sufrido durante la guerra en busca de antiguos objetos jedi que pudiera vender, creditos, o lo que pudiera encontrar y usar.


Mierda,Mierda,Mierda-Decia Tras mientras le pegaba patadas a su caza averiado-¿De todos estos planetas he tenido que acabar en este estupido trozo de mierda?. Bueno-Dijo resignandose-Parece que voy a tener que explorar un poco.
Despues de unas horas, Tras diviso un poblado, era lo primero que veia, a parte de los interminables campos verdes con extraños animales y vegetacion. Le recordaba a Naboo, su planeta natal, lleno de hierba y pastos, pero con grandes montañas y, en algunas zonas, fisuras o grietas en la superficie de un inmenso tamaño.
Cuando llego porfin al poblado, lo que vio le dejo asombrado, sus habitantes vivian en unas casas de un blanco marfil que cegaba la vista, parecia no haber problemas a simple vista, era un planeta que, en aquel momento, no parecia de la republica. Pero lo era, el planeta figuraba como un planeta republicano aun por colonizar, y, sin embargo, sus habitantes parecian muy prosperos. Tras se acerco a uno de ellos.
-Perdone, me he estrellado con mi nave ¿Podria ayudarme?-Dijo con cierta reticencia.
El habitante lo miro y siguio andando.
-A lo mejor no habla basico-Penso Tras.
Pero lo volvio a intentar, y al final, se resigno y siguio al habitante, que se parecia tremendamente a un humano, y Tras no tenia claro que no se tratase de uno. Llegaron a una puerta, negra como el carbon, como todas las demas y el habitante le hizo señas de que entrara. Tras hizo caso, pero agarro su vibroespada por si acaso.
-Saludos de mi parte y de la de mi gente extraño-Dijo un hombre vestido con tunicas moradas.
-Vaya este si habla basico-Penso Tras.-Hola, perdone las molestas, pero mi nave se ha estrellado en su planeta eeh...-Alderaan-Bien, en Alderaan, y necesitaria saber si podrian ayudarme, ya que parece que son aliados de la republica-Dijo Tras...

Y resultó k eran violadores intergalacticos y el resto lo dejo a vuestra imaginacion jejejeje

No, es broma, ta muy guapa la historia

Cuando parecia que Tras ya habia ganado la confianza de los habitantes de alderaan, una gigantesca explosion sacudio la pequeña ciudad, enviando los restos de las casas y vehiculos destruidos cientos de metros a la redonda, destrozando casas, propiedades y personas.
-¿Que ha sido eso?-Penso Tras en voz alta.
-No puede ser-Dijo Sefir, el gobernador de la ciudad recordando los ataques mandalorianos.
-No, si parece que ahora la ayuda la tendre que prestar yo-Penso Tras.
-Porfavor, ayudanos y te prestaremos las piezas para tu nave-Dijo Sefir mientras pertrechaba su equipo de combate.
-Parece que no tengo salida...-Penso Tras-Esta bien, pero debo pedir antes una cosa...Un rifle de precision-
-Esta bien, espero que sepas usarlo pero por si acaso enviare tropas contigo-
-no necesito niñeras-Dijo Tras mientras salia de la casa.
Cuando salio de la casa, el aspecto de la ciudad y sus calles era muy distinto al que habia visto antes, filas de soldados bien preparados, aunque bastante escasos se situaban perfectamente coordinados en filas igualmente perfectas, eran dos batallones muy entrenados y disciplinados, nada parecido a los granjeros milicianos que Tras habia visto combatir y morir como moscas cuando servia bajo la republica. Nada de eso, estos eran verdaderos soldados.
Dos de ellos se acercaron a Tras.
-Hola, somos Jack y Firenic-Dijo uno.
-Ya le he dicho a Sefir que no necesito niñeras-Repitio Tras.
-Pues no hagas que tengamos que actuar como una-Replico Firenic a lo que Tras contesto con una sonrisa picara.
Los tres se dirigieron hacia una pequeña montaña desde la que divisaban el ejercito enemigo, un ejercito sith, con sus resplandecientes armaduras plateadas reflejando el sol.
Firenic se puso en posicion para disparar su arma, una gran ametralladora pesada mientras Jack se disponia a soltar una rafaga con su fusil blaster. Tras agarro a los dos.
-Esperad-Dijo Tras.-No sabran de donde les vienen.-Dijo apuntando con su rifle de francotirador.
Tras disparaba, y a cada disparo suyo, un sith se desplomaba en el suelo.
-Una bala un muerto-Decia Tras.
El ejercito sith se acercaba a la ciudad, y Tras y sus dos nuevos compañeros tuvieron que retroceder hasta la ciudad, con el resto del pequeño ejercito.
-¿Que nos ataca capitan?-Pregunto Sefir.
-No son mandalorianos señor, no se lo que son-Contesto Jack.
-Sith-Dijo Tras.
-Muy bien, pues entonces ya tenemos algo en comun con la republica-
-Posicionad a los francotiradores-Grito Firenic.

El ejercito Sith acababa de entrar en la ciudad, pero no conseguian avanzar nada debido a que las expertas tropas de Alderaan tenian mucha experiencia por los constantes ataques mandalorianos. Las tropas sith comenzaron a enviar asesinos, que usaban generadores de campos de sigilo y vibrocuchillos dobles, que eran mortales. La batalla se encrudecia y los cuerpos se amontonaban en las calles.
Jack era infalible a corta distancia, aunque no se llebava muy bien con las armas de combate cuerpo a cuerpo era muy agil y conseguia golpear con su rifle a los sith, tumbarlos y dispararles. Firenic, por su parte, no necesitaba el cuerpo a cuerpo, debido a que su gran metralleta pesada eliminaba cualquier amenaza que tuviera cerca el oficial, y si por algun motivo se acercaban demasiado, les acuchillaba con la parte delantera de la metralleta.
La batalla marchaba bien cuando de pronto se cambiaron las tornas y comenzaron a llegar tropas de elite, con sus armaduras doradas, mas habiles incluso que los oficiales, con armaduras rojas.
De repente, aparecio un lord sith en la entrada de la ciudad.
Su entrada desmoralizo a las tropas, que el mismo desmembraba sin piedad hasta que llego a Sefir, al cual atraveso cual papel. Tras dejo a un lado su rifle y salto con su vibrocuchillo y su vibroespada en mano contra el sith, que acabo arrebatandole el vibrocuchillo, lanzandolo contra un soldado de Alderaan. La batalla fue dura, Jack y Firenic intentaron ayudar, pero el sith les empujaba y nunca conseguian acertarle con sus disparos. El sith lanzo un rayo contra Tras, que perdio su arma y quedo indefenso en el suelo mientras el sith se acercaba a el.
-Solo me queda una opcion-Penso Tras mientras sacaba rapidamente un sable laser de la parte trasera de su cinturon.
El sith se quedo paralizado y solo pudo contener algunos golpes del soldado, pero al final este fue capaz de hacerle un corte en ambas piernas y el sith callo de rodillas.
-Has echo mal atacando justo cuando me he estrellado en esta maldita roca.-Dijo Tras. Y clavo su sable en el pecho del lord sith.
-Ha matado a Scaflowne.-Gritaban los soldados sith mientras huian.
-No sabia que eras jedi.-Dijo Jack.-Nos hubiera venido bien ese sable en el comienzo de la batalla-
-No soy jedi-Dijo Tras inspeccionando el cuerpo sin vida de Sefir-Y vuestro lider ha muerto-
-Ese no era Sefir, el esta de viaje diplomatico en Onderon.-Dijo Firenic.-¿Si no eres jedi de donde has sacado esa preciosidad azul?-
-Fue...un regalo-....

un regalo mmmmmmmmm XD

mu wena

Despues de la batalla, los soldados recogieron los quince cuerpos de los soldados que habian muerto y a los heridos, que superaban los cuarenta. El ejercito Sith habia dejado solamente quince cuerpos, que sin embargo, sembraron temor y rabia en toda la pequeña ciudad. el pueblo se tiño de negro, de negro luto, para despedir a sus familiares muertos en combate contra un enemigo que nunca habian visto. Este seria el comienzo de la integracion de Alderaan en la republica.
Mientras la mayoria estaban en el funeral, Tras recogio, limpio y preparo su equipo.
-Quiza deberia darme una vuelta por la ciudad, aun tardaran en conseguir las piezas.-Penso Tras.
Salio de la casa de Sefir, en la que se habia instalado en la ausencia del gobernador. Las calles eran estrechas, de un blanco marfil que contrastaba con el negro luto de las prendas de los ciudadanos que volvian del funeral. Aun tratandose de un pueblo en luto, el contraste entre los colores hacia de la ciudad una autentica preciosidad.
Tras caminaba por las calles, encontrando siempre la misma estampa. Giro a la derecha y encontro un callejon sin salida, en el extremo opuesto habia una vieja tienda deslustrada, sucia, sin nada que ver con el resto de la ciudad. Tras se decidio a entrar.
La tienda era pequeña y andrajosa, tenia articulos muy extraños. Incluso articulos que Tras no conocia. Se dispuso a tocar un cristal de un color negro como la ceniza cuando oyo un ruido y aparecio una mujer, joven, vestida con tunicas negras y con la cara tapada en extremo.
-Eso es un cristal unico.-Dijo la joven.
-Eso parece.-Dijo Tras.-Nunca habia visto un sable laser que proyectara una luz negra-
-Asique tu eres el jedi que nos ha salvado.-
-El proximo que me llame jedi acabara colgado de sus propias entrañas-Dijo Tras. Salio de la tienda sin decir una palabra mas, con gesto sombrio.
-¿Que les ha dado a todos por llamarme jedi?-Se preguntaba Tras.-Tener un sable laser no significa ser un estupido jedi. Soy un mercenario, y de los mejores.-
De repente se cruzo con un anciano que le agarro del brazo, pero no fue un agarron molesto, mas bien fue como si el anciano se sintiera seguro, como si pudiera ver su mente, Tras adivino que queria algo de el.
-¿Puedo ayudarle?-Pregunto Tras.
El anciano no medio palabra y se dirigio a buen paso hacia una casa, tan desordenada como la tienda, oscura y sucia. Al igual que los ajados harapos del anciano. Entraron. En una esquina, todo lo que habia de valor en la casa, un comunicador, una mesa y diversos objetos que a Tras le parecian mundanos. a su derecha, nada mas entrar, habia una mesita, pequeña. Tras se pregunto si de verdad habia tanta diferencia en aquella ciudad como para que el gobernador viviera en un palacio enorme y la gente de a pie en unas casas tan pequeñas y sucias.
-Jedi, debes ayudarnos, mi hijo esta herido y no puede decirme que le pasa a mi mujer-Dijo el anciano.
Tras miro en las habitaciones y vio un soldado herido e inconsciente tumbado en la cama, y en la otra una anciana retorciendose de dolor en otra cama, que parecia un poco mas grande.
Sin percatarse ni darle importancia a la equivocacion del anciano, Tras busco en su mochila y saco un kit de antidotos y un kit de primeros auxilios que entrego al anciano.
-Espere, intentare saber que le pasa, tome esto-Dijo Tras mientras se acercaba a la anciana. Tras unas cuantas pruebas, las mejores que pudo hacer con lo que tenia a mano, Tras dedujo, no sin cierto miedo que se debia a una intoxicacion por veneno de Raulyus, una planta venennosa, pero cuya flor valia por lo menos mil creditos, y a aquella familia, segun parecia, cualquier ayuda le vendria bien.
Tras cogio el kit de antidotos y le administro una dosis, lamentandose de no tener nada mas fuerte cuando de repente se dio cuenta de que habia visto una mata de therel, el antidoto para el Raulyus.
Tras salio corriendo de la casa, dejando su mochila en la habitacion.
Despues de media hora consiguio llegar a donde se habia estrellado su nave, y en el lado derecho del impulsor, encontro lo que buscaba, planta de therel. No era recien arrancada pero era mejor que nada. Tras corrio hacia la casa de nuevo, retrasandose un poco porque se perdio en la laberintica ciudad. Entro en la casa, tirando la mesita de al lado de la entrada hasta la habitacion y exprimio el poco jugo que quedaba en la planta en un cuenco de plastiacero. El anciano lo calento, y se lo administro a su mujer. Tras porfin consiguio algo de alivio.
-Gracias jedi, gracias.-Decia el anciano.-Deja que te recompense, no es mucho pero es lo que tengo-Dijo sacando quinientos creditos de un cajon bien escondido.
-Ahorratelo, no lo he echo por los creditos.-Dijo Tras hurgando en su mochila.-Aqui tienes cinco mil creditos, el medicamento que debes comprar es caro-Dijo Tras y se fue.
A la salida encontro a la joven de la tienda.
-Asique no eres jedi...-Dijo la joven.
-Ya te he dicho que no, nunca lo he sido ni lo soy ahora.-Dijo Tras.
-Pues te comportas como uno.-
-¿A que viene eso?-
-Venga, jno te hagas el tonto, lo he visto todo-
-¿Que esperabas que hiciera, dejarla morir?-
-Ese medicamento no cuesta mas de quinientos creditos y lo sabes.-
-Cierto, pero no llevaba suelto.-
-No puedes ayudar a cada uno que te cruces.-
-Pero puedo intentarlo.-
Tras llego al hangar en el que se guardaban las naves. Descubrio que Jack y Firenic estaban expectantes a una nave. Tras se acerco.
-¿Que pasa?-
-Ha llegado Sefir.-Dijo Jack mirando hacia la ostentosa nave...